Por José Armando González
Managua, 02 de septiembre de 2020. Más de 180 profesionales de la salud y del sector agua y saneamiento inician hoy el curso virtual e interactivo “Tratamiento de agua a nivel domiciliar y almacenamiento seguro (TANDAS)”, el que pretende mejorar la calidad del agua de consumo, reducir las enfermedades de origen hídrico y enfrentar mejor la pandemia del COVID-19.
El proceso formativo, que tiene una duración de 11 semanas, está organizado por la Red de Agua y Saneamiento de Nicaragua (RASNIC), el Centro de Tecnologías SMART de Agua y Saneamiento (Centro SMART), la Comisión Interinstitucional Nacional para el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 6 y el Centro de Tecnologías Asequibles de Agua y Saneamiento (CAWST por sus siglas en inglés).
Para Mauricio Villagra, Coordinador del Comité Ejecutivo de la RASNIC, los participantes al finalizar sus estudios podrán “brindar más fácilmente sus asesorías a las familias para conservarse sanos y enfrentar el COVID-19, con información para asegurar la calidad del agua en el hogar, tanto en las zonas rurales, periurbanas y urbanas; sobre todo en zonas donde aún persiste el racionamiento. Además, podrán explicar mejor las diferentes opciones de tratamiento y el almacenamiento seguro”.
Son siete los módulos formativos que contempla el curso virtual, con una carga horaria de dos horas semanal y sesiones interactivas de una hora. Entre los temas a desarrollar están los métodos de barreras múltiples, opciones de sedimentación, filtración y desinfección, y los criterios de calidad para el éxito de un programa TANDAS.
Esta primera edición está dirigida al personal de salud a nivel municipal, departamental y nacional, principalmente a responsables de salud ambiental de los Sistemas Locales de Atención Integral en Salud (SILAIS) departamentales, higienistas a nivel municipal, funcionarios del Nuevo Fondo de Inversión Social y de Emergencia (FISE) y el Instituto Nacional de Acueductos y Alcantarillados (INAA). Para la segunda edición se espera que participe el personal de las Unidades Municipales de Agua y Saneamiento (UMAS).
Los organizadores apuntan a que “todas las familias tengan acceso a agua y saneamiento seguro, a través del desarrollo de capacidades de estos profesionales y haciendo más accesibles las tecnologías de agua y saneamiento que provee la empresa privada”, concluyó Villagra.